El 90% de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos que se desplegará en España es de fabricación nacional, por lo que el Gobierno prevé que esa inversión «genere un efecto tractor en la cadena de valor nacional», según señala en una respuesta parlamentaria a la que ha tenido acceso Europa Press.
A su juicio, la apuesta por la movilidad eléctrica representa «una señal clara a un sector clave» como el de la automoción, que permitirá atraer inversiones en la fabricación de nuevos modelos eléctricos, garantizando la orientación del sector hacia la sostenibilidad y, por tanto, su viabilidad a medio y largo plazo.
En este sentido, el Ejecutivo ha reseñado que la apuesta por la movilidad eléctrica y el impulso a la infraestructura de recarga «generará importantes efectos positivos».
Berreras del sector
Por otro lado, el Gobierno ha indicado que ya se han celebrado dos reuniones del Grupo de Trabajo de Infraestructuras de Recarga del Vehículo Eléctrico en las que se ha avanzado «significativamente» en la identificación de barreras.
En este grupo se encuentran asociaciones del sector como Anesdor, Aedive, Aelec, Anfac, Ganvam, Faconauto o Feneval, entre otras, que según el Gobierno cubren toda la cadena de valor del despliegue de la infraestructura de carga.
También participan varias comunidades autónomas, ministerios y la FEMP.
El Ejecutivo ha explicado que en estas reuniones se ha trabajado en temas prioritarios como la comunicación, la agilización administrativa y la mejora de los programas de ayuda.