La automoción está acometiendo un proceso de reconversión y descarbonización hacia el vehículo eléctrico.
Una transición que no se está produciendo a la velocidad prevista, pero hacia la que se dirigen la mayoría de fabricantes con cambios en sus flotas y una hoja de ruta enfocada en su electrificación.
Para acompasar ese nuevo escenario, su industria auxiliar está diversificando sus negocios con el objetivo de anticiparse a las nuevas necesidades del automóvil.
Esto es precisamente lo que ha hecho la ingeniería Aktrion Group, con sede en Almussafes: analizar el mercado y detectar las carencias actuales para tomar la delantera a lo que va a acontecer.
Y su conclusión ha sido lanzarse a la puesta en marcha de un centro tecnológico y multifuncional destinado a garantizar la calidad de todo tipo de vehículos, principalmente eléctricos, con el foco puesto en el estudio y reparación de las baterías que los componen.
Se trata de un espacio único a nivel nacional, que ofrecerá servicios de análisis, diagnóstico, reparación y mantenimiento de baterías y sistemas de todo tipo vehículos, así como sus infraestructuras de recarga.
«La idea de proyectar este centro es adelantarnos a las necesidades del mercado para tener un ventaja competitiva y propiciar un ecosistema y un conocimiento sobre el vehículo eléctrico», explica Pau Muñoz, director de operaciones de la compañía.
La ubicación elegida ha sido una nave de unos 2.000 metros cuadrados en el Parque Juan Carlos I de Almussafes (Valencia), donde se sitúa la mayor parte de la industria valenciana del automóvil con Ford como empresa tractora. En estos momentos, se están reacondicionando esas instalaciones para que puedan estar en marcha en el primer trimestre de 2024. La inversión prevista es de 500.000 euros.
«Dar una segunda vida a las baterías»
La prioridad va a ser el diagnóstico y reparación de las baterías, ya que, según explica Muñoz, en este momento mayoritariamente se sustituyen generando residuos en lugar de buscar y resolver sus deficiencias.
«De forma genérica, a partir de los 160.000 kilómetros o los diez años, la capacidad de las baterías baja al 70%. Actualmente, cuando hay un problema lo habitual es sustituirla y poner una nueva. Nosotros pretendemos darles una segunda vida, reparándolas, analizando la incidencia para intentar que funcionen a pleno rendimiento», apostilla.
Por tanto, lo primero será hacer un análisis y diagnóstico para conocer el problema del aparato, de cualquier marca y fabricante, con vistas a poder solventar la avería en caso de que sea posible.
«De no ser así, el siguiente paso es gestionar ese residuo. Hasta ahora nadie está ofreciendo con garantías estos servicios que requieren de conocimiento y desarrollo de procesos», remarca el director de operaciones de Aktrion.
Foto: EDUARDO MANZANA
De esta forma, el centro contará con una zona principal con elevadores para desmontar las baterías de los vehículos que pasarán a una sala blanca para su evaluación. La reparación se acometerá en un taller, equipado con alta tecnología, con cabinas de pintura y carrocería, ya que, aunque se centrará en baterías, su aspiración es ser un recinto dedicado a la electromovilidad. De hecho, también se estudiará y atenderán necesidades relacionadas con los puntos de recarga, motos o patinetes eléctricos.
Asimismo, habrá un área específica de almacenaje de material y un espacio de ingeniería para trabajar en el diseño de los procedimiento y procesos. «Desde Aktrion hemos desarrollado unos tests que identifican deficiencias e incidencias para poder hacer la sustitución del componente dañado y volver a ensamblarlo», explica Muñoz.
Sinergias con Ford y Volkswagen
Dado que todavía es un campo desconocido, desde Aktrion impartirán cursos para formar a los cerca de 30 técnicos cualificados con los que se quiere arrancar el próximo año. De ellos, 10 serán ingenieros eléctricos y electrónicos y otros 20 serán mecánicos.»Será un centro polivalente. No solo queremos trabajar con coches, sino reacondicionar motos, por ejemplo las de Acciona que circulan en las ciudades, o las que utilizan muchas empresas de paquetería. Se trata, por tanto, de ser «un aliado de todos los eslabones de la cadena de valor del sector de automoción y movilidad para asegurar la calidad de sus sistemas y la sostenibilidad en todos los procesos», remarca.
En este momento, los técnicos de Aktrion ya colaboran con proveedores de baterías, de celdas de combustible, fabricantes y desarrolladores de infraestructuras, aunque todavía no tienen ningún acuerdo cerrado. «Las grandes multinaciones como Ford, Renault o Volkswagen quieren proyectos tangibles que puedas mostrarles para que la solución técnica que ofrezcas les sea ventajosa y favorable. Por eso, hemos querido adelantarnos a sus necesidades para mostrarles lo que podríamos hacer junto a ellos», afirma. De hecho, también quieren generar sinergias con el campus de baterías que se va a montar la multinacional alemana junto a la planta de celdas de baterías en Sagunt para formar a su futuro personal.
Conscientes del retraso en la electrificación de Ford y que hasta 2026 no está previsto que la gigafactoría de baterías de Volkswagen en Sagunt arranque, su idea es que el centro empiece atendiendo a empresas con eléctricos, así como compañías de leasing y renting y proveedores que están trabajando en los componentes de vehículos eléctricos e híbridos. También, prevén recibir proyectos de otros países en los que opera la ingeniería a nivel mundial.
No obstante, su decisión de empezar por España, pese a la escasa penetración del coche eléctricos frente a otros países europeos, se debe a su fuerte equipo conocimiento sobre este campo. «España tiene mucho recorrido a nivel de ingeniería. Contamos con mucha experiencia, tecnología y desarrollo y, por eso, el grupo se decantó por empezar en Almussafes, ya que no partimos de cero», destaca.
Expansión por Madrid y Barcelona
Tras esta apertura, la multinacional abrirá centros similares en Barcelona y Madrid. De momento, están creando los equipos de trabajo y buscando personal. «No tenemos ninguna ubicación identificada porque la idea es montar primero los equipos en 2024 para empezar en Madrid y Barcelona a partir de 2025», avanza.
En su primer año de funcionamiento en Almussafes, Aktrion prevé alcanzar una facturación cercana al millón de euros para recuperar la inversión. «Es un proyecto ambicioso, pero con muchas perspectivas. Aunque el eléctricos en España no está 100% implementado, sí que lo están los híbridos y hay otros vehículos que ya son eléctricos. Existe un gran mercado», concluye.