Recientemente, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha concedido un préstamo de 150 millones de euros a Cepsa para el despliegue de más de 1.800 cargadores ultrarrápidos en sus estaciones de servicio ubicadas en España y Portugal.
Como a su vez, ha anunciado la adquisición de más de 200 gasolineras en Valladolid, con planes de expansión que apuntan a alcanzar las 500.
El objetivo estratégico de la empresa es electrificar todas sus estaciones, en consonancia con su enfoque de instalar cargadores de más de 150 kilovatios.
En este marco, José Andrés García Álvarez, Business Development de la firma, anticipa a Mobility Portal España: “Contamos con más de 400 proyectos en fase de permitting y aproximadamente 50 ya han sido construidos”.
Estos logros contribuyen de manera significativa a un balance anual positivo y están alineados con su ambición de proporcionar a sus clientes una experiencia de uso equiparable a la de los vehículos a combustión.
Su próximo paso en este sentido es maximizar el número de proyectos que tienen en fase de permitting para que lleguen a estar operativos, aunque “hay una barrera importante”.
García Álvarez hace referencia a los períodos de espera para poner en marcha los cargadores, dentro del marco normativo vigente.
Esto deriva en que, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), de los 25.180 puntos de recarga instalados a nivel nacional, 8.869 se encuentren fuera de funcionamiento.
Por ello, los CPOs deben planificar con dos o tres años de anticipación, asegurándose de que, al momento de la instalación del cargador, la tecnología sea la más actualizada.
De cara a esto, Cepsa ha optado desde el principio por ofrecer equipos con capacidades superiores a 150 kW.
Especialmente considerando que la tecnología de los vehículos eléctricos está progresando hacia la aceptación de estas potencias cada vez mayores.
«La reglamentación impone restricciones significativas, pero somos lo suficientemente grandes y hábiles como para adaptarnos a ella y garantizar que nuestro despliegue también lo haga», indica.
La responsabilidad no recae únicamente en las empresas.
También corresponde a las autoridades educar tanto a los consumidores finales como a los fabricantes de coches y las entidades públicas en materia de movilidad eléctrica.
Esto se debe a que, en algunas instancias, existe un desconocimiento total sobre ciertas normativas y decretos que afectan al sector, el cual desempeñará un papel fundamental en el proceso de descarbonización.
España ha trazado planes ambiciosos y si bien es crucial mantenerlos, “es igualmente necesario respaldarlo con las normativas”.
Cepsa continúa apostando por mejorar la experiencia del usuario
Desde la compañía aspiran a brindar a los usuarios una experiencia premium, lo más cómoda posible y equiparable o incluso superior a la que experimentan con los vehículos a combustión.
En este sentido, están implementando diversas medidas, como la integración de terminales de punto de venta en los cargadores, con el propósito de que los clientes prescindan de la necesidad de descargar múltiples aplicaciones.
El usuario puede simplemente llegar, conectar su vehículo, realizar el pago con su tarjeta y proseguir con su ruta.
Con sus cargas ultrarrápidas pretenden que el usuario no demore más de 20 minutos en realizar su recarga en una carretera.
Además, están trabajando en mejorar sus instalaciones, proporcionando áreas cubiertas para resguardarse de las condiciones meteorológicas, servicios sanitarios y tiendas de conveniencia, entre otros.
“Cepsa estará siempre del lado del cliente, apostando por la electrificación, y brindándoles apoyo, porque nos debemos y somos gracias a ellos”, reconoce García Álvarez.
El Business Development hace hincapié en la necesidad de demostrar a los conductores que la electromovilidad es factible en la actualidad y que mejorará en el futuro.
Por tanto, este esfuerzo debe contar con el respaldo de las autoridades públicas, encargadas de asegurar este beneficio social, y requiere de una coordinación eficiente, “ya que es un bien que impactará a toda la sociedad”.