Es sabido que uno de los sectores más difíciles de electrificar es el transporte pesado de largas distancias. Las tecnologías que existen no tienen la autonomía suficiente.
O al menos así lo afirma el Subdirector General de Calidad y Seguridad Industrial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (MINCOTUR), José Manuel Prieto.
“Los fabricantes están poniendo deadlines anteriores a los marcados para 2035 sobre coches eléctricos, pero los vehículos pesados, por supuesto, tienen que persistir más tiempo en el diésel”, comenta.
Así lo marca la legislación de parte de la Comisión Europea. Desde Bruselas las reducciones de gases de efecto invernadero (GEI) para este sector en específico son menores a las del resto.
La normativa no va a cero emisiones sino a reducciones de torno al 10 o 15 por ciento.
Lo que se viene trabajando en el sector del transporte pesado es en el Euro 7. Este se encuentra con normativas en elaboración en Parlamento, Consejo y Comisión europea.
“Hará un impulso en cuanto a poner restricciones más estrictas, incluso introducir nuevos contaminantes que antes no se median”, dice Prieto.
Por otra parte, los fabricantes se mueven hacia una electrificación del transporte pesado. El sector se mueve despacio pero va en continuo crecimiento.
El coste de los camiones
“En este momento tenemos un grave problema de falta de capacidad económica para adquirir unidades eléctricas o más sostenibles, por lo cual nos retraemos a entrar en esa inversión”, comenta Carmelo González, Presidente del Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC).
Hace ya tiempo se han embarcado en un proceso de renovación tecnológica. Han incorporado nuevas unidades y componentes, completamente convencidos de que ese es el futuro por el que hay que ir.
Pero llegaron a un punto en el que no saben cómo hacer frente a los altos costes de este tipo de segmentos.
Cabe reconocer que la renovación del parque móvil es una pieza fundamental para trabajar una mayor sostenibilidad: el parque está envejecido y las empresas son las principales interesadas en renovar sus vehículos.
Por ello, el presidente de CNTC expresa: “Si tuviese la oportunidad, le pediría a quien legisla que sea conscientes de que el conflicto que hoy tenemos es que los precios son inabordables, son inasumibles por cualquier empresa”.
Uno de las claves es entender que desde el sector hay una creencia generalizada de que las administraciones y el ámbito político no han prestado atención al transporte por carretera e incluso a veces se le ha demonizado, según se detalla.
¿Sólo conviene la electrificación?
Durante el ciclo de Personalidades, organizado por Portal Movilidad España, el Director de Preventa y Sostenibilidad de Scania Group, Alberto Linares Amarilla, comenta sobre las metas a cumplir a futuro en su empresa.
“Todavía no hay tecnología que te permita hacer largas distancias. Pero, por ejemplo, vemos a la pila de combustible en el largo plazo, como solución, si bien no es nuestro principal foco”, comenta.
Scania supone que para el 2027 o 2028 estarán las primeras unidades impulsadas de esta forma.
“Nosotros apostamos firmemente por los vehículos eléctricos por un tema de eficiencia energética y de costes de nuestros clientes”, explica Linares.
Otro de los puntos, son los biocombustibles. “En España no tenemos un suministro de biocombustibles muy potente pero, hay realidades diferentes en Europa como en el norte. Allí, es muy común echar biocombustibles a los vehículos”, argumenta el Director de Preventa y Sostenibilidad.
“En camiones es todo muy reciente, estamos recién empezando, pero tenemos objetivos muy fuertes de descarbonización”, explica Linares.
Una de las soluciones que comienzan a verse son los híbridos-eléctricos en aplicaciones urbanas y regionales que “jugarán un papel representativo”.
“Aparecen tecnologías que pueden dar autonomías para aplicaciones regionales y de media distancia un poco más largas de 300 kilómetros o 350 kilómetros”, comenta Linares.