En un reciente estudio elaborado por Alphabet, se ha observado que tan solo un 9% de los ciudadanos españoles contempla la posibilidad de adquirir un coche eléctrico.
En tanto, apenas un 7% lo utiliza para sus desplazamientos y un 3% lo emplea de forma regular.
En este contexto, Marcos Ortega, Head of Customer Management Office en Stellantis Iberia, asegura: “De aquí a 5 años, veremos ciudades con menos ruido y más electrificadas”.
Pese a que “España avanza a menor velocidad” en la transición, en comparación con otros países, según Ortega, año a año se experimentará un cambio gradual a medida que se incremente el parque de vehículos eléctricos.
De acuerdo a las últimas cifras publicadas por la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE), en 2023 España acumula un total de 98.431 matriculaciones de coches electrificados.
Si se desglosa según el tipo de propulsión, los 100% eléctricos suman 52.993 unidades, de las cuales 36.843 corresponden a turismos.
Mientras que el objetivo para 2030 es que circulen 5 millones de vehículos de cero emisiones, el del año actual es 190.000 unidades, de las cuales España se encuentra muy lejos.
“Todos los fabricantes estamos trabajando para facilitar esta transición”, sostiene el Head of Customer Management Office en un Webinar organizado por Business Insider España y Auto Bild.
Fiat, Peugeot y Citroën son algunas de las marcas que el Grupo Stellantis comercializa con mayor frecuencia en el territorio nacional.
En este punto, considera que es poco probable que las ciudades queden exentas de coches, pero sí se comenzarán a ver otros vehículos de menor tamaño.
Un ejemplo que menciona es el Citroën AMI. Con 2,41 m de largo, 1,39 m de ancho y 1,52 m de alto, ocupa solo media plaza de aparcamiento.
Además, su diámetro de giro de 7,20 m le permite al conductor realizar maniobras con facilidad dentro de la ciudad.
Esta solución de movilidad urbana dispone de una autonomía de 75 kilómetros y un tiempo de carga de 4 horas a una potencia de 220 kW.
“Este coche coexistirá con otras soluciones de movilidad, como patinetes, bicicletas y el transporte público, que espero se desarrolle de una forma más ordenada a la que vemos hoy”, indica.
En su búsqueda de lograr que los vehículos eléctricos sean más accesibles para el público en general, han presentado el nuevo Citroën ë-C3.
Esta novedosa serie de coches se fundamentará en la plataforma Smart Car, diseñada específicamente para automóviles económicos.
El modelo se pondrá a la venta en 2024 por menos de 24.000 euros.
No obstante, en concordancia con otros líderes de la industria, Ortega enfatiza la necesidad de que los incentivos y la infraestructura de recarga sean más accesibles para impulsar de manera efectiva esta transición.
“A corto plazo, nuestro objetivo es que el cliente se beneficie desde el primer día de las ayudas, es decir, que se hagan efectivas al momento de la compra”, detalla.
Stellantis se queda con 63,8 millones del Perte VEC II
Esta asignación previsional fue oficialmente confirmada por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
Sin embargo, dicho respaldo está significativamente por debajo de la solicitud que realizó el principal fabricante de coches del país, que superó los 200 millones de euros.
Debido a esta diferencia, la empresa ha manifestado su intención de presentar las correspondientes alegaciones para obtener el máximo apoyo a los prototipos presentados.
Se trata de proyectos de ensamblaje de paquetes de baterías en sus tres factorías nacionales ubicadas en Vigo, Madrid y Zaragoza.
Así como para la construcción de una gigafactoría en esta última.
En las localidades de Pontevedra y Figueruelas, tienen previsto implementar la plataforma de producción de vehículos eléctricos STLA Small.
Esta se proyecta como una garantía de empleo en sus instalaciones españolas durante la próxima década, puesto que se utilizará como base para la fabricación de todos los coches pequeños que lancen a partir del año 2025.
