La Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) ha publicado recientemente el documento «Propuestas para una hoja de ruta de la movilidad eléctrica».
El archivo incluye 18 medidas a desarrollar durante la actual legislatura para lograr los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) y garantizar el futuro de la industria de la movilidad en España.
El director general de la patronal, Arturo Pérez de Lucía, señala:
«En España, los incentivos para el vehículo eléctrico son más complejos que en otros países, en un momento en el que tendríamos que acelerar si queremos llegar a los objetivos (del PNIEC), que no están en sintonía con las ventas actuales, lo que implica matricular en siete años 12 veces más de lo que se ha matriculado en los últimos 13 años”.
Esta Hoja de Ruta llega después de un año récord.
El 2023 fue el año en el que más vehículos eléctricos se vendieron en España, superando las 70.000 matriculaciones, el doble si sumamos los híbridos enchufables.
Con estos números, es la segunda potencia de la Unión Europea en los que más crece el número de personas que apuesta por el vehículo eléctrico.
Los puntos de recarga también aumentaron más que nunca el año pasado.
En 12 meses se instalaron casi uno de cada tres puntos de carga pública operativos, que ya son más de 30.000 por todo el país.
Concretamente, en el último año se colocaron 8.777, casi un tercio de todos los puntos actualmente operativos.
Esto supone un incremento del 40,7 por ciento con respecto a los datos de finales de 2022.
Desde AEDIVE celebran estas cifras, aunque destacan que es necesario imprimir un ritmo más acelerado de las ventas para cumplir los objetivos nacionales, que el Gobierno actualizó en junio pasado, en la revisión del PNIEC, fijando un horizonte de 5,5 millones de vehículos electrificados en nuestras carreteras para 2030.
También será necesario publicar información actualizada de los puntos de recarga públicos, tanto de su número y potencia, como de su tiempo de uso, con el fin de comprobar si el número de puntos instalados continúa siendo suficiente para abastecer el parque.
Cabe destacar que los usuarios aún se encuentran a la espera del Mapa Nacional de Puntos de Recarga que había prometido el Gobierno.
Hoja de ruta propuesta por AEDIVE
La Estrategia publicada por AEDIVE propone aumentar la ambición con medidas consensuadas con el sector, fáciles de implementar y probadas con éxito en los países europeos líderes en movilidad eléctrica.
A corto plazo, la asociación apuesta por un nuevo Plan MOVES que incluya un adelanto de las ayudas a los compradores y por agilizar la tramitación de la infraestructura de carga, especialmente la de carga rápida y ultrarrápida.
A medio plazo, se propone acompañar las ayudas de un plan de choque fiscal con mejoras en el IVA, el Impuesto de Sociedades y el Impuesto de matriculación para lograr que el coche eléctrico sea asequible para todos los bolsillos.
También sugiere desplegar medidas para impulsar los nuevos modelos de movilidad compartida a nivel local, después de que en 2023 superasen los seis millones de usos en diferentes aplicaciones.
Además de impulsar la electrificación de la flota de taxis, acompañado de un mayor despliegue de infraestructura pública de recarga rápida.
A largo plazo, el sector tiene la vista puesta en los grandes retos de la legislatura.
Propone poner la electrificación en el centro de la nueva Ley de Movilidad Sostenible, que el ministro de Transportes anunció recientemente que reiniciaría su tramitación en febrero.
Recientemente el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, anunció la decisión del Consejo de Ministros de retomar el proyecto, con la expectativa de que sea aprobado el próximo mes.
También subrayó el compromiso con la Unión Europea para su entrada en vigor antes de que termine el año.
Apuesta además por el fortalecimiento de la industria nacional ante los ambiciosos planes de ayuda y el reciente éxito de los modelos asiáticos y estadounidenses.
Por ello también sugiere desplegar un plan de movilidad eléctrica para el sector empresarial que incentive la electrificación de la flota empresarial mediante objetivos progresivos anuales y planes para empleados.
Una industria nacional que va más allá
El sector cada vez apuesta más por España y espera facturar más de 300.000 millones de euros para 2030, más de 40.000 millones cada año.
El país cuenta con cerca de un centenar de centros de fabricación en España, además de varios proyectos anunciados.
En algunas actividades, como la producción de puntos de recarga, se trata de «la principal potencia exportadora de la Unión Europea».
«Si se despliegan los incentivos adecuados, España aspirará a ser el hub europeo de la movilidad eléctrica, con empresas nacionales green tech, que podrían crear más de 250.000 empleos directos e indirectos en los próximos años», asegura.
En ese sentido, Arturo Pérez de Lucía afirma: «No todo son las matriculaciones, en España hay que poner en valor que tenemos una potencia industrial que no tienen otros países».
«Fabricamos todo tipo de vehículos, toda clase de infraestructuras de recarga o componentes y soluciones tecnológicas de almacenamiento energético. Por lo tanto, tenemos un ecosistema que nos hace especialmente diferentes«, añade.
No solo ello, sino que desde AEDIVE se señala la importancia de considerar al vehículo eléctrico mucho más que un instrumento para la descarbonización y la reducción de la contaminación en la movilidad.
Es también un eje fundamental de eficiencia energética, al ser el único sistema de propulsión capaz de interactuar con el sistema eléctrico para impulsar energías renovables, generación distribuida y almacenamiento energético.
El transporte por carretera en España supone un consumo de más de 300 TWh, que se podrían reducir a la mitad si se electrificara el parque rodado, utilizando energías renovables y autóctonas.
Con el parque actual es absolutamente dependientes de otros países en la compra de combustibles fósiles.
«Esto nos hace muy débiles desde la perspectiva económica, energética y geopolítica en un mundo cada vez más complejo, en el que la clave pasa por lograr la mayor autosuficiencia», indica Pérez de Lucia.
Los camiones eléctricos
Para 2024, el sector espera grandes avances en la electrificación del transporte de mercancías.
Los grandes fabricantes ya comenzaron a presentar sus primeros modelos de camiones eléctricos.
La Unión Europea aprobó objetivos vinculantes de instalación de puntos de carga de transporte pesado para 2030.
Por eso, desde AEDIVE se reclama al Gobierno no llegar tarde a esta transformación.
La Hoja de Ruta incluye un Plan de Infraestructuras de recarga para vehículos eléctricos pesados (PIRVEP), con un decálogo de propuestas que ya se ha comenzado a trabajar con el sector.
El siguiente paso será definir las medidas regulatorias para cada punto del decálogo que impulsen su cumplimiento y que estará disponible en la primera parte del año.